Belleza

Los diamantes no solo cautivan a quienes aprecian las joyas o las gemas; esto no sorprende, ya que, además de su resplandor incomparable, estos preciosos minerales poseen propiedades asombrosas y una historia fascinante.

La mayoría de ellos se originaron en las profundidades de la Tierra hace más de mil millones de años, donde el carbono se transformó en estas raras joyas debido a altas temperaturas y presión. Algunos diamantes excepcionales son tan impresionantes que nos gustaría explorarlos con más detalle en este artículo.

¿Dónde se pueden comprar joyas con diamantes?

Los diamantes cada vez tienen más presencia en las joyas, pero como puedes imaginar, esos diamantes son de menos valor que los que te vamos a mostrar a continuación.

Si quieres comprar o regalar las mejores joyas con diamantes, te invito a visitar el catálogo de Mikikoko. Dentro de ese catálogo podrás encontrar una amplia variedad de joyas. Normalmente tendemos a pensar que los anillos son los más comunes con este tipo de combinación, pero hay otras opciones entre las que elegir. Puedes optar por gargantillas, pendientes, colgantes, pulseras…

A la hora de adquirir este tipo de joya no solo tenemos que tener en cuenta el diseño, también la calidad de la joya. Si la calidad de la joya es de calidad, sobre todo porque el diamante es bueno, el precio de la misma se irá revalorizando con el paso del tiempo. Recuerda, siempre hay que comprar las joyas en tiendas profesionales que certifiquen que la calidad está asegurada.

Dicho esto, pasamos a mostrarte un listado de nombres de diamantes famosos que son conocidos a nivel internacional.

1- Gran estrella de áfrica

Este famoso diamante, también conocido como Cullinan I, pesa unos impresionantes 530,20 quilates, lo que lo convierte en el diamante más grande del planeta. El Cullinan, tallado en forma de pera, se encuentra engastado en las joyas de la corona británica, específicamente en el cetro real.

Originado a partir del diamante en bruto más grande jamás encontrado, llamado Cullinan, con un peso asombroso de 3106 quilates, este valioso hallazgo fue descubierto en Sudáfrica en el siglo XI. La preparación previa a su procesamiento requirió seis meses de trabajo.

Finalmente, el diamante en bruto fue dividido en nueve diamantes grandes y 96 pequeños. En la actualidad, sigue ostentando el título de ser el diamante tallado más grande del mundo.

2- Orlov

Encontraron este diamante azul verdoso puro en la India y lo tallaron en forma de rosa con una máquina especial llamada Mogul. Ahora está en el Tesoro Estatal de Moscú junto con otros diamantes raros. Según la leyenda, originalmente estaba incrustado en la escultura del dios hindú Vishna en un templo secreto en Srirangam, India. Se dice que un desertor francés lo robó en el siglo XVIII y lo vendió a un marinero inglés por 2,000 libras.

El destino del diamante se desconoce hasta que llegó a Amsterdam, donde el oficial ruso Grigory Orloff lo adquirió para su amante, la zarina Catalina la Grande, por 90,000 libras esterlinas. Lo llevó a Rusia, y desde entonces el diamante lleva su nombre. Catalina la Grande lo incorporó al cetro real y, como agradecimiento, le regaló a su amante el Palacio de Mármol en San Petersburgo. A pesar de estos lujosos regalos, la felicidad en el amor no acompañó a esta pareja, y su relación finalmente llegó a su fin.

3- Regente

Aunque este diamante no es el más grande del mundo, con sus 140,50 quilates, se le considera el más hermoso debido a su completa transparencia y su talla impecable. Este excepcional diamante fue encontrado en la India en 1698 y luego se incluyó en las joyas de la corona de Francia.

Por ejemplo, Luis XV llevó la corona real que ostentaba este diamante, y su hijo igualmente famoso, Luis XVI, también lo lució en su cabeza. En la actualidad, el diamante se exhibe en el Louvre de París.

Diamante Centenario

Este diamante excepcional, en su versión original, tenía cerca de 600 quilates. Se encontró en 1986 y, con la colaboración de un equipo hábil de joyeros, incluyendo al reconocido Gabi Tolkowsky, se dio forma a un diamante contemporáneo y puro que pesa 273,85 quilates. Esta joya es el tercer diamante tallado más grande a nivel mundial y se presentó oficialmente en 1991 en la Torre de Londres.

4- Koh-i-Noor

Este diamante ovalado de 105 quilates, conocido originalmente como Koh-i-Noor en persa, cuenta con una historia que se remonta a la antigüedad, siendo uno de los diamantes más antiguos que existen. Su hallazgo tuvo lugar en 1304, y desde entonces ha transitado a través de diversos dueños a lo largo de los siglos. Inicialmente perteneció a distintas familias nobles de la India y Afganistán, hasta que eventualmente pasó a ser propiedad de la Compañía de las Indias Orientales.

En el año 1850, este precioso diamante fue obsequiado a la reina Victoria, quien lo apreciaba especialmente y solía lucirlo en forma de broche. Más adelante, el diamante fue engastado en una de las coronas más magníficas del mundo, que posteriormente portaron la reina Alejandra, María von Teck y la reina madre. En la actualidad, este distinguido diamante reposa en la Torre de Londres, compartiendo espacio con otras joyas de la corona.

5- Taylor Burton

Este hermoso diamante de 69,42 quilates proviene de Sudáfrica y fue descubierto en 1966. Su nombre, “Taylor-Burton”, se debe a que Richard Burton se lo obsequió a su querida esposa, la actriz Elizabeth Taylor. Burton adquirió este diamante con forma de pera como regalo de compromiso por 1,1 millones de dólares. Tras el fallecimiento de Burton en 1979, Taylor vendió la joya por una asombrosa suma de 2,8 millones de dólares y destinó el dinero a obras benéficas. La última vez que se tuvo noticia de este diamante fue en Arabia Saudita.

6- Ojo de ídolo o Hope

Este peculiar nombre se refiere a un diamante con la forma de una pera, el cual, según la leyenda, formaba parte de una estatua sagrada de la cual fue sustraído. La historia cuenta que el diamante sirvió como rescate que el jeque de Cachemira pagó por la liberación de la princesa Rashid, quien había sido secuestrada por su rival, el sultán turco.

7- Sancy

Este increíble diamante tuvo como propietario inicial a Carlos el Temerario, el duque de Borgoña, quien lo perdió en una batalla en 1477. No obstante, el diamante, que tiene una forma de pera y pesa 55 quilates, lleva el nombre de un dueño posterior: el embajador francés de Sancy, que desempeñó funciones en la corte turca en el siglo XVI. Por ejemplo, el embajador lo regaló al rey francés Enrique III, quien lo llevaba debajo de una gorra destinada a cubrir su calvicie.

En el siglo XVII, el diamante fue vendido al rey inglés Jaime I Estuardo. También fue propiedad de su sucesor, Jaime II, el último de la familia Estuardo, quien se vio obligado a huir del país con el diamante. La última referencia del diamante se remonta a la época de la Revolución Francesa, durante la cual la piedra preciosa se perdió.

8- Esperanza azul

Este diamante azul, con un peso de 45,52 quilates, lleva el nombre de su dueño, Henry Thomas Hope. A lo largo de su historia, no ha traído prosperidad a sus propietarios, sino más bien desgracias y preocupaciones.

El hijo de Hope perdió toda su fortuna, y la siguiente dueña, la Sra. McLean, llegó al extremo de suicidarse. En 1949, el renombrado Harry Winston adquirió la gema. Sin embargo, al intentar venderla, ningún cliente mostró interés en esta piedra desafortunada. Actualmente, el diamante se exhibe en el Instituto Smithsonian.